Conflicto y Violencia
El conflicto se ha conceptualizado y naturalizado como un elemento inherente a la vida misma en sociedad y se le atribuye opiniones negativas, equiparándolo como sinónimo de problema, confrontación y como un elemento que no permite tener una vida estable.
Sin embargo, desde una perspectiva para la paz, el conflicto permite el aprendizaje, la evolución y la reconstrucción del tejido social, esto a través de estrategias de comunicación y comprensión. Un conflicto es una diferencia entre intereses, necesidades, objetivos o metas de una persona en su interacción con otra, es decir, el conflicto es inevitable en la interacción social. Por lo tanto, los conflictos no se deben clasificar en buenos o malos, sino que simplemente existen (Ruiz Retrepo, 2009).
Un conflicto no necesariamente conlleva a la violencia, puede generar sentimientos de frustración, sentimientos destructivos, generar ansiedad o preocupación lo cual puede repercutir en trastornos de salud.
Ahora bien, veamos que es la violencia. La Organización Mundial de la Salud (OMS) en el informe mundial sobre la violencia y la salud (2002) definió el término violencia como:
“El uso intencional de la fuerza o el poder físico, de hecho o como amenaza, contra uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad, que cause o tenga muchas probabilidades de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o privaciones”.
Como se puede observar, la definición de la OMS hace visible el uso de la fuerza física o el poder como un método de la violencia, teniendo como consecuencia daños psicológicos. La violencia igual que el conflicto es un tema multicausal, se puede manifestar y ejercer de diversas formas y en diversos contextos, es por ello que el gobierno federal a través de la estrategia nacional de prevención de adicciones (ENPA) utiliza el término “violencias”.
Las violencias no sólo se ejercen a través acciones judiciales o militares, o donde haya evidencia de sangre, muerte o desaparecidos, las violencias también ocurren por factores estructurales, socioeconómicos, por falta de acceso a servicios de salud, por falta de oportunidades culturales, deportivas, por temas de género, de diversidad, entre otros.
Es así como tanto el conflicto como las violencias tienen implicaciones en la salud tanto física como mental de las personas, es por ello que hay que hablar del conflicto y las violencias, hay que aceptar la condición humana, escuchar a los demás cuando plantean sus ideas, aprender a dialogar, aprender a escuchar y comunicar. Todo esto a través de una cultura de paz, promoviendo valores como el respeto, la libertad, la democracia, la educación, la tolerancia, la cooperación y la igualdad entre hombres y mujeres.
AUTOR:
M.P.S. FLOR G. MAGALHY ZAVALA PONCE
Coordinación de Cultura de Paz
Secretaria Administrativa Facultad de Informática
Fuentes:
- Ruiz Restrepo, J. (2009). Elementos para una teoría del conflicto. La Sociología En Sus Escenarios, (11). Recuperado a partir de https://revistas.udea.edu.co/index.php/ceo/article/view/1692
- Etienne G. Krug, Linda L. Dahlberg, James A. Mercy, Anthony B. Zwi & Rafael Lozano. (2002). Informe mundial sobre la violencia y la salud. https://www.refworld.org.es/category,REFERENCE,WHO,,,54aa900a4,0.html